Mal de ojo: maleficio
que lanza una persona sobre otra para perjudicarle. Aunque se considera una
superstición, no se puede dejar de lado el hecho de que en ciertas ocasiones se
ha demostrado que determinadas personas han sido víctimas de él.
Maldición: fórmula
de origen religioso o mágico que se utiliza para dañar a otros y ocasionarles
toda clase de males. Las brujas, al ser quemadas en las hogueras, pronunciaban
frecuentemente maldiciones sobre sus ejecutores.
Maleficio: Hechizo
con el que se ocasionan determinados daños a los seres vivos, sean personas o
animales.
El empleo moderado de la
expresión “maldecir” significa, decir una vulgaridad o una blasfemia, puede
resultar ofensivo y no deja de ser de mala educación, pero no es letal.
Sin embargo, una maldición
puede considerarse una fórmula mágica poderosa y peligrosa, cuya finalidad es
provocar dolor, sufrimiento, enfermedad, e incluso, la muerte.
La práctica de maldecir ha
existido en todas las culturas y se han lanzado habladas o escritas, invocando
a un demonio o dios y después se especifica con todo lujo de detalles macabros
lo que se quiere para la víctima.
Esta es una fórmula para
lanzar una maldición del siglo IV: “Te convoco, espíritu maligno, que moras en
el cementerio y que robas la salud al hombre. Ven y pon un nudo en la cabeza
(nombre de la víctima), en sus ojos, en su boca, en su lengua, en su garganta;
echa agua envenenada en su estómago. Si no vas y le echas agua en el estómago,
te enviaré gran cantidad de ángeles malignos que vayan por ti. Amén.”
Estas maldiciones podían ser
susurradas a cientos de kilómetros de distancia o gritadas al oído de alguien.
Sin embargo, las maldiciones escritas son más poderosas que habladas, ya que
podían sobrevivir al momento de la creación.
Se piensa que las maldiciones
escritas tienen más poder si se entierran en lugares que tiene que ver con la
muerte: tumbas, campo de batallas y sitios donde se realizan ejecuciones.
También pueden echarse dentro de pozos o lugares que conecten con el mundo
subterráneo.
Y para aumentar los efectos,
se atraviesa el nombre de la víctima con un clavo y se ata bien fuerte el papel
con un alambre.
Los síntomas que suelen
presentar los maldecidos, entre otros, son: nauseas, vómitos, dolores de
cabeza, insomnios, etc.
Las víctimas de maldiciones,
tiene la posibilidad de buscar una bruja o hechicero que contrarreste la
maldición y pueda deshacer, protegerse y llevar una vida normal.
Para saber si te han hecho un hechizo.
Si sientes que todo va mal y
que todo se tuerce, puede ser un periodo de mala racha o que hay de por medio
un mal de ojo que está creando vibraciones negativas.
¿Cómo averiguarlo?
Con incienso: Cuenco de cobre
grande e incienso puro. Se coloca en el cuenco un poso de incienso y se le
prende fuego con una cerilla de madera, si el humo es de color oscuro es que
hay negatividad, si es claro, todo está bien.
Con sal: Plato de cerámica,
sal gruesa, alcohol de quemar. Se coloca en el plato un puñado de sal gruesa y
cúbrelo con alcohol (algunas recetas recomiendan 27 graos y 7 cucharas de
alcohol), encenderlo con una cerilla de madera, si la sal chispea es que hay
negatividad, si el chispeo es fuerte es porque hay bastante.
Con hojas de olivo: Plato de
cerámica, agua, aceite de oliva, hojas de olivo. En el plato lleno de agua se
vierte tres gotas de aceite de oliva, luego se coloca una hoja de olivo
bendecida (se puede bendecir imponiendo un símbolo sagrado que tenga especial
importancia para nosotros), si el aceite tiende a alejarse de la hoja es porque
existe mal de ojo.
Con limón: Dejar repartidos
por la casa un número impar de limones. Si después de varios días el limón se
seca, todo está bien, si se pone verde o con manchas negras o marrones es
debido a que hay negatividad.
¿Cómo librarse de una maldición?
Utilizar velas negras o con
formas especiales: serpiente negra de dos cabezas para devolver las vibraciones
malignas. Calavera negra para parar un ataque mental. Imágenes grises para
eliminar la mala suerte.
Las piedras que suelen romper
energías negativas son la turmalina negra, obsidiana y el cristal de roca.
Amuleto contra las influencias maléficas:
Se necesita: canela, ruda,
sal, muérdago, cordón negro con siete nudos, bolsita roja de tela y vela negra.
Este amuleto debe prepararse
en luna menguante, primero encender la vela y colocar los ingredientes
alrededor poniéndolos cada uno siguiendo el sentido contrario del reloj hasta cerrar el círculo. Recita un
conjuro u oración y deja que la vela se consuma, después guarda los objetos en
el saquito deshaciendo el círculo en el mismo sentido que se colocó, cierra el
saquito con el cordón de 7 nudos y da las gracias. Lleva siempre el saquito
encima.